Esta es la zona de Las Canteras más resguardada y protegida del oleaje. Tales condiciones nos brindan la oportunidad ideal para disfrutar de infinidad de actividades acuáticas agradables y entretenidas de forma cómoda y segura. Es éste el espacio ideal para compaginar una inmersión con un relajado día de playa en familia. En esta bahía de apenas 2 m de profundidad durante la marea baja, cualquiera puede experimentar nuevas sensaciones bajo el agua con el equipo mínimo de buceo: las gafas y el tubo. Esta inmersión resulta ideal para las primeras zambullidas. La zona exterior de La Barra ofrece, además, una opción añadida para las personas más atrevidas.
A diferencia de lo que ocurre en el resto de fondos rocosos de Canarias, en el interior de la bahía de Las Canteras apenas existen erizos, por lo que las algas crecen exuberantes, formando auténticos bosques sumergidos. La playa protege estos bosques de las inclemencias del mar, y estos, a su vez, dan cobijo a la vida que luego se reparte por toda la bahía. Además, podemos encontrar pequeños sebadales: praderas de una planta marina de vital importancia en Canarias. Ésta es, precisamente, una de las únicas zonas de Canarias donde podemos apreciar tan de cerca un sebadal sin necesidad de usar sofisticados equipos de buceo.
Se trata de un área muy variada y rica. En ella, podemos nadar sobre enormes bancos de arena, grandes rocas que salpican los arenales y que concentran la vida a su alrededor, bosques en miniatura y una barra rocosa sumergida escondida a los ojos del resto de usuarios de la playa. La diversidad de paisajes que ofrece este lugar nos permite descubrir la gran variedad que existe de entre las formas de vida de los diferentes ambientes submarinos de Canarias, cómodamente, sin necesidad de separarnos de la superficie.